Queridos compañeros,

Hoy hemos amanecido con la triste noticia del fallecimiento del Dr. Carlos Ramírez, nuestro Presidente de Congresos y Reuniones Científicas. Como algunos sabéis, a pesar de su juventud, llevaba 5 años peleando con una enfermedad que nunca logró doblegar su voluntad y su entereza para continuar empujando en la vida. De hecho es posible que la mayoría de vosotros no supieseis de ello hasta ahora. Hace casi 5 años, cuando se le diagnosticó su enfermedad, me dijo que no tenía miedo a morir. Solamente me pidió que le ayudase a tener una vida normal, llena de proyectos que ocupasen este tiempo que él sabía que estaba contado.

Carlos Ramírez

Y es que para Carlos la vida era una sucesión de proyectos que enseguida se convertían en retos en los que ponía su alma. Carlos encontró en la Sociedad un lugar donde ilusionarse trabajando para todos. Sin embargo, su tarea como responsable de Congresos no era fácil en ese momento: necesitábamos organizar un Congreso Nacional de magnitud que le diese un empujón a la Sociedad después de los años vividos en las anteriores legislaturas y poner el motor en marcha de nuevo. Como él siempre hacía, puso el alma en el proyecto y organizó en Sevilla el Congreso Nacional más grande y con más asistencia de los 70 años de historia de la SEORL. Gracias a él pudimos transmitir el optimismo que teníamos en la dirección de la sociedad para los años venideros, lo cual ha repercutido positivamente sobre el resto de aspectos, especialmente el capítulo económico. Y en este año, un año difícil por la presencia de un Congreso Mundial en París, y un Congreso Europeo reprogramado en Barcelona a una semana del nuestro, teníamos una posición complicada para sostener nuestra reunión. Y tocaba confiar de nuevo en Carlos para que el motor de la sociedad no se parase. Y como era previsible, Carlos no falló. Tenemos este Noviembre en Madrid un Congreso con un nuevo récord de inscripciones. Se lo debemos a él.

Era un hombre extraordinario en absolutamente todo lo que hacía. Una persona valiente, con un sentido de la responsabilidad y de la lealtad que muchos de vosotros habréis tenido el privilegio de vivirla como yo también la he vivido. Seguro que sabremos honrarlo adecuadamente desde la SEORLCCC.

Ha sido un honor vivir, trabajar y compartir con él.

Nuestro pésame más sentido para su familia, su mujer, Paz, y sus dos hijos, Juan y Alicia, su gran proyecto en la vida.

Un abrazo muy grande para todos

Mario Fernández Fernández
Secretario General de la SEORL-CCC