La insuficiencia respiratoria nasal implica una dificultad para respirar de forma correcta cuya causa principal es una obstrucción que impide el paso del aire a través de las fosas nasales. Este problema es uno de los motivos más frecuentes de consulta en el área de rinología, de hecho, se estima que un tercio de la población tiene algún tipo de obstrucción nasal y al menos una cuarta parte de esta requerirá tratamiento quirúrgico.
La obstrucción nasal puede ser debida a una desviación del tabique o septum nasal (la causa más habitual) como consecuencia de un traumatismo o alteraciones en el crecimiento, así como a una inflamación o deformación de los cornetes, derivada de la rinitis o rinosinusitis.. El tratamiento a seguir en estos casos, cuando los síntomas son persistentes y dificultan la calidad de vida de quienes lo sufren, es quirúrgico y existen diferentes técnicas que pueden ayudar a mejorar esa insuficiencia respiratoria de la nariz.
Cirugía de cornetes: turbinoplastia mediante radiofrecuencia
La cirugía más empleada para disminuir el tamaño de los cornetes que están ocasionando obstrucción e insuficiencia respiratoria nasal, muy habitual en pacientes con rinitis, es la turbinoplastia por radiofrecuencia.. La técnica basada en la radiofrecuencia consiste en aplicar una forma de energía electromagnética mediante un electrodo a los cornetes, produciendo un aumento de la temperatura de los tejidos y con un daño mínimo de las estructuras más próximas, ya que solo efectúa la vaporización a baja temperatura del punto de contacto. Después de unos días, se generará una zona de retracción, es decir, una disminución del volumen de los tejidos que componen los cornetes.
Esta cirugía se realiza a través de los orificios nasales por lo que no provoca cicatrices externas. Por lo general, la turbinoplastia con radiofrecuencia no precisa un taponamiento nasal, posterior a la intervención quirúrgica. Entre los beneficios de esta técnica se incluyen la mejoría de la permeabilidad nasal y la desaparición de los síntomas producidos por la dificultad respiratoria nasal.
Septoplastia
Se trata de la cirugía indicada para corregir una desviación septal que genera obstrucción nasal con el fin de facilitar la respiración del paciente. Se ocupa, mediante diferentes técnicas, de corregir la desviación del tabique en su forma anatómica con el fin de corregir las deformidades. Los otorrinolaringólogos pueden aplicar el uso de la endoscopia en la mayoría de los casos lo que permite un tratamiento mínimamente invasivo muy útil en crestas septales, desviaciones posteriores y en cirugías de revisión, ya que permite una mayor visualización y minimiza el riesgo de traumatismos.
Por su parte, las desviaciones anteriores caudales, y en casos en los que el tabique esté muy desviado se corrigen mediante cirugía abierta convencional. De esta forma los otorrinolaringólogos cirujanos de cabeza y cuello consiguen visualizar de forma más completa todo el tabique y el dorso nasal.
Septorrinoplastia
Debido a que a menudo la deformidad o desviación del tabique tiene sus consecuencias funcionales (respiratorias) y estéticas, será necesario aplicar técnicas de cirugía plástica encaminadas a la corrección estética de la nariz y así permitir unos resultados satisfactorios para el paciente. En este sentido, el otorrinolaringólogo cirujano de cabeza y cuello tiene la capacitación completa y adecuada para realizar una cirugía de nariz que combine el restablecimiento funcional y estético de la nariz gracias a su amplio conocimiento de la nariz. Así, realizará de forma previa a la cirugía un análisis facial basado en las proporciones relativas de cada uno de los aspectos del rostro, para ello tendrá que tener en cuenta los principios de estética facial, aprendidos durante su formación.