La Medicina del Sueño tendrá una categoría en los Premios BiC 2022

La Medicina del Sueño contará por primera vez con una categoría en los Premios BiC (Best in Class), según han anunciado los organizadores de estos galardones. La concesión de estos reconocimientos se basa en la puntuación obtenida con el índice ICAP (Índice de Calidad Asistencial al Paciente) que se establece a partir del análisis multivariable de los datos recogidos en los cuestionarios de autoevaluación cumplimentados por los hospitales y centros de atención primaria a través de la web www.premiosbic.com.

La organización valora todos los cuestionarios. Los cinco fi­nalistas recibirán una noti­ficación de los Premios BiC. El Comité de Expertos elige entre los cinco finalistas al ganador en cada categoría. Los ganadores reciben un diploma acreditativo en un acto público. Además, los ganadores y finalistas forman parte de la Guía de los Mejores Hospitales y Servicios Sanitarios que se edita anualmente.

El plazo para optar a este premio está abierto hasta el próximo 30 de septiembre. La inscripción se debe formalizar cumplimentando el cuestionario disponible en www.premiosbic.com.

Los premios BiC están organizados por ‘Gaceta Médica’ y la Cátedra de Innovación y Gestión Sanitaria de la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid. Su objetivo es reconocer públicamente a los mejores servicios, hospitales y al mejor centro de AP, del territorio nacional, tanto público como privado, que buscan la excelencia en la atención que prestan a sus pacientes.

Tipos de cirugía de feminización y masculinización de la voz

La voz contribuye decisivamente a la identidad de género. Es la tarjeta de presentación de un individuo en multitud de ocasiones. La congruencia del tono vocal con la identidad sexual sentida es fundamental para la satisfacción de las personas transgénero.

1. Técnicas de feminización de la voz

El mayor grupo de personas que optan por la feminización de la voz es el de las mujeres transgénero; también se puede aplicar a aquellas mujeres que tienen androfonía (voz grave, voz estereotipadamente masculina) debido al consumo excesivo de andrógenos o a distintas enfermedades productoras de testosterona como síndrome del ovario poliquístico o síndrome de Klinefelter. Actualmente existe una demanda creciente en actores, cantantes, cómicos y otras profesiones del mundo del espectáculo.

Lo primero que debemos saber es que la terapia hormonal a base de estrógenos se ha demostrado que tiene muy poco efecto sobre la calidad de la voz. Por lo tanto, para elevar el tono vocal tenemos que actuar sobre la laringe y el comportamiento vocal.

Muchas técnicas quirúrgicas han sido propuestas para aumentar el tono vocal. Todas ellas se basan en tres principios fundamentales:

  • Incrementar la tensión de las cuerdas vocales.
  • Alterar la consistencia de las cuerdas vocales.
  • Descender la masa de las cuerdas vocales.

Las técnicas quirúrgicas más utilizadas son: la tiroplastia tipo IV, la glotoplastia, la cordotomía láser y la laringoplastia de feminización.

1.1Aproximación cricotiroidea (tiroplastia tipo IV)

A través de una incisión cervical, el cartílago cricoideo es desplazado hacia atrás y hacia arriba, y el cartílago tiroides, hacia abajo y hacia delante. Se aproximan los cartílagos cricoides y tiroides, y se fijan mediante puntos de sutura o miniplacas. De esta forma los dos cartílagos se acercan y la tensión de las cuerdas vocales se incrementa. En condiciones normales el tono vocal se mantiene elevado por la contracción del músculo cricotiroideo. Si se logra incrementar al menos 2 mm la longitud de las cuerdas vocales, el tono vocal aumenta.

Al ser una cirugía sobre el esqueleto laríngeo, se preserva la integridad de las cuerdas vocales y no se daña la mucosa de estas, por lo tanto, no afecta a su vibración y se disminuye el riesgo de una disfonía iatrogénica. Esta técnica es potencialmente reversible, al seccionar las suturas y separar manualmente la fusión entre cartílago tiroides y cricoides.

Su principal desventaja es que los resultados iniciales no persisten a largo plazo, descendiendo el tono vocal entre los 6 y los 18 meses tras la cirugía. Se debe a que la tensión entre los dos cartílagos se relaja porque pueden ceder los puntos de sutura debido a la gran sobrecarga que soportan. Además, precisa una incisión cervical, con el problema estético que representa.

 

1.2 Técnicas de acortamiento de cuerdas vocales (glotoplastia)

El tamaño de la laringe en varones es notablemente diferente que en mujeres. Los varones con un tono vocal alto o agudo tienen laringes pequeñas, con sus correspondientes cuerdas vocales cortas. Además, el tono vocal alto es una característica común en pacientes con sinequia anterior congénita o adquirida. El tono vocal se eleva mediante la creación de una sinequia anterior que acorte la longitud de vibración de las cuerdas vocales. Este procedimiento de acortamiento de las cuerdas se puede hacer mediante un abordaje endoscópico o externo.

Abordaje endoscópico:

Wendler describió esta técnica endoscópica que lleva su nombre. El procedimiento se realiza bajo anestesia general. La endolaringe es expuesta mediante laringoscopia directa. El borde libre y la superficie superior e inferior del tercio anterior de ambas cuerdas vocales es desepitelizado con instrumentos fríos o bien con láser. Hay que tener especial cuidado de no lesionar el ligamento vocal. Las dos cuerdas vocales se suturan firmemente para obtener una nueva V en comisura anterior. Se realizan dos puntos de sutura que se pueden reforzar mediante fibrina o pegamento biológico.

Tiene la ventaja de evitar la realización de incisión en el cuello y buenos resultados a largo plazo, es por esto por lo que en la actualidad es probablemente la técnica para aumentar el tono vocal más utilizada a nivel mundial.

Una modificación a la técnica de Wendler es la realizada por Juan Carlos Casado, presidente de la Comisión de Laringología, Voz, Foniatría y Deglución de la SEORL-CCC. Consiste en llevar a cabo una cordotomía longitudinal (desde la comisura anterior hasta el proceso aritenoideo) bien con láser diodo o con bisturí de electrocoagulación. El objetivo de esta cordotomía es triple: disminuir la tensión de la mucosa vocal suturada para permitir un pegado de los bordes de la misma más rápido, al cicatrizar la incisión realizada se incrementará la rigidez de la cuerda vocal y disminuir la masa de las cuerdas vocales.

Abordaje externo:

Bajo anestesia general se realiza una incisión cervical de 4 cm. Sobre la prominencia del cartílago tiroides, en la línea media se corta el pericondrio. Una cuña anterior de cartílago tiroides se extirpa para eliminar la nuez de Adán. Se realiza un corte horizontal sobre la membrana cricotiroidea y sobre el cartílago tiroideo en forma de T. De esta forma se abre como un libro la glotis cortando las cuerdas vocales a la altura de la comisura anterior. El borde libre anterior de ambas cuerdas vocales se desepiteliza y se suturan. Al precisar incisión cervical y ser potencialmente más iatrogénica esta técnica casi no se usa.

1.3 Otras técnicas quirúrgicas

Cordotomía láser o técnica LAVA (Lasser-Assisted-Voice-Adjustment)

 Se realiza bajo anestesia general y visión directa con microlaringoscopia. Consiste en la vaporización del tejido superficial de las cuerdas vocales (respetando el músculo vocal) con láser CO2 o diodo, a una potencia de 5 W. El corte se efectúa a 1-2 mm lateral al borde libre del pliegue vocal que se extiende a lo largo de la superficie superior del pliegue vocal, desde el proceso vocal hasta el extremo anterior lo máximo posible. El éxito de la técnica quirúrgica depende de la rigidez de la cicatriz resultante.

Laringoplastia de feminización

Su objetivo es cambiar una laringe desde una estructura masculina a otra laringe anatómicamente femenina. Para ello no solo actúa sobre las cuerdas vocales (acortándolas y tensionándolas), sino también sobre el cartílago laríngeo (acortándolo y elevándolo) para de esta forma elevar la frecuencia fundamental de la voz, así como las frecuencias resonanciales del tracto vocal.

2. Técnica de masculinización de la voz

La masculinización de la voz consiste en conseguir una voz más grave, más estereotipadamente masculina, con la frecuencia fundamental más baja.

Es demandado por hombres que por alguna razón tienen una voz más aguda de lo que corresponde a su morfología corporal. Esto se puede deber a:

  • Trastornos de la muda vocal (en la adolescencia).
  • Clara disociación entre la morfología corporal y el tono vocal (cuerpo grande con voz aguda, infantil).
  • Rigidez aumentada de las cuerdas vocales (sulcus, cicatrices, poscordectomía).
  • Tensión excesiva de las cuerdas vocales.

Inicialmente se podría pensar que también podría ser útil en el caso de hombres transgénero (female-to-male transexual, que representan el 25% de las personas transgénero). Sin embargo, está demostrado que la toma de andrógenos (testosterona) produce una reducción de la frecuencia fundamental a los 3-4 meses, que suele ser suficiente para conseguir una voz más masculina y que perdura aunque se deje la medicación. La cirugía de masculinización de la voz es útil para los hombres transgénero que no han sufrido cambio en su tono vocal tras la administración de andrógenos. La más utilizada es la tiroplastia tipo III.

2.1 Tiroplastia tipo III

Consiste en acortar las cuerdas vocales llevando la comisura anterior hacia atrás (retrusión o retranqueo) con lo que se produce una reducción de la tensión de las cuerdas y un aumento de su densidad o masa. Esta cirugía se realiza bajo anestesia general y a través de una incisión en le piel del cuello. De esta manera las cuerdas vocales se quedan menos tensas y con mayor densidad y esto produce una voz con un tono vocal por debajo de 165 Hz.

2.2 Otras técnicas de masculinización de la voz

Técnica de Ford: también denominada tiroplastia tipo IIIb. Consiste en hacer un solo corte a cada lado de la quilla tiroidea despegando cuidadosamente el pericondrio interno. Una vez que se tiene el suficiente espacio, se introduce el diedro anterior por debajo del resto del ala tiroidea. Tiene menos posibilidad de invadir la vía aérea.

Técnica de Kocak: diseñan en forma romboidal el fragmento de cartílago tiroides que se retrae, sin alcanzar los bordes de las alas tiroideas con las incisiones; de esta forma aumenta la estabilidad del esqueleto laríngeo y permite futuras intervenciones adicionales como la tiroplastia de medialización o la aducción aritenoidea.

Quimiodenervación: Consiste en inyectar al paciente 15 unidades de toxina botulínica (Botox) en cada uno de los músculos cricotiroideos bajo una guía electromiográfica; de esta forma se puede conseguir un descenso de la frecuencia fundamental hasta 90-100 Hz. La hipótesis sugerida detrás de este procedimiento es deshabilitar el uso de la voz de falsete al denervar de forma química los músculos cricotiroideos mientras refuerza la potencia y el volumen de los músculos tiroaritenoideos. Las principales ventajas de la inyección de Botox es que es reversible y preserva las estructuras anatómicas de la laringe.

Inyección de ácido hialurónico en ambas cuerdas vocales: la razón detrás de la laringoplastia por inyección es aumentar la masa por unidad de longitud. Más aún, de manera similar a otras cirugías de alteración del tono, hay una activación de la retroalimentación auditiva, lo que permite a los pacientes modificar su técnica vocal, lo que conduce a una voz de tono bajo más duradera.

3. Terapia logopédica

La terapia logopédica, es fundamental y complementaria al tratamiento quirúrgico tanto de feminización como de masculinización de la voz.

Tras la cirugía de feminización de la voz se abordará logopédicamente para rehabilitar los pliegues vocales, con el fin de evitar posibles inflamaciones, constricciones laríngeas o posibles patologías. En la rehabilitación se introducen diferentes parámetros de la voz que nos ayudan a agudizar y a modificar el gesto, con comunicación no verbal (postura corporal y expresión facial) que nos facilitará conseguir una voz estereotipadamente femenina. Además, se entrenará el mantenimiento de la resonancia aguda combinado con el incremento del tono para que la voz sea totalmente femenina.

El tratamiento de elección para conseguir una voz estereotipadamente masculina, con un tono más grave o más bajo es mediante terapia hormonal (testosterona) asociada a terapia vocal (logopedia). No existe un consenso respecto al tiempo necesario para decidir si la terapia vocal ha sido exitosa, pero, en general, no debe ser menos de 3-4 meses.

En caso de mala respuesta a la terapia vocal, se aconseja el tratamiento quirúrgico (comentada anteriormente). En este último caso la logopedia postoperatoria también es muy efectiva y, como en el caso de la feminización de la voz, complementaria a la cirugía. La terapia logopédica se encarga de masculinizar la voz con el objetivo de modificar el gesto vocal, mantener la tonalidad grave y posicionar la laringe en su estado de equilibrio.

Signos de alerta de pérdida de audición en personas mayores

La presbiacusia es la pérdida de audición que ocurre con el envejecimiento.Según datos de la Comisión de Audiología de laSEORL-CCC, la presbiacusia, o pérdida auditiva causada por la edad, afecta al 20% de la población a partir de los 60 años, al 30% entre los 65 y 70 años, y al 70% a partir de los70.

Se trata de una pérdida gradual, en la que primero desaparecen los sonidos agudos, se conservan los graves, y se dejan de oír consonantes como la ‘s’. Si no se pone remedio a tiempo, el problema será mayor, y se limitaran los resultados de la amplificación auditiva con audífonos y otras ayudas técnicas.

En muchas ocasiones las personas que sufren dicha pérdida auditiva no piden ayuda y el papel de los familiares se vuelve fundamental para detectar el problema en las fases iniciales. Es por ello que la SEORL-CCC proporciona una serie de claves para detectar la pérdida de audición en personas mayores:

-Oye pero no entiende: los primeros síntomas que los pacientes empiezan a notar es que oyen, pero no entienden.Esto sucede porque la pérdida de audición no afecta a todos los sonidos a la vez, se pierden los sonidos agudos, pero no los graves.

-Ambientes ruidosos: la situación de no entender la conversación se agrava cuando hay ruido alrededor y cuando hay varios interlocutores en la misma conversación.

-Acúfenos o tinnitus: los problemas descritos pueden coexistir con la aparición de ruidos o zumbidos en los oídos que, además de ser molestos, interfieren y dificultan aún más la audición.

-Televisión: es muy habitual que las personas mayores empiecen a no entender lo que se dice en televisión o pongan el volumen muy alto de esta.

-Oír la puerta y el teléfono: no suelen escuchar cuando suena el teléfono y tienen más problemas en la detección del tono que en la propia conversación. Lo mismo ocurre con el timbre de la puerta.

-Conversaciones: No entienden cuando les hablan en voz baja y a menudo hacen repetir las cosas varias veces. Necesitan que se les hable más despacio.

-Conversaciones a distancia: De habitación a habitación, o a distancia, no responden. Si les hablan por la espalda tampoco.

-Ruidos externos: En situaciones en las que hay un poco más de nivel de ruido (tráfico, televisión ruido de la calle) tienen más dificultad y, ante la duda y la inseguridad de saber lo que han dicho los demás, no participan en la conversación.

Prevención de la presbiacusia

Aunque la pérdida auditiva causada por la edad sea inevitable en la mayoría de los casos, existen una serie de factores de riesgo que pueden contribuir a acelerar y acentuar su aparición.

 Desde la SEORL-CCC se recomienda:

  • No exponerse al ruido: lo más dañino para el oído es someterse de forma prolongada a ruidos fuertes. Hay que evitar los auriculares en la medida de lo posible y limitar su volumen.
  • Evitar algunos medicamentos: antibióticos, diuréticos, antipiréticos pueden tener efecto sobre las células del oído. Hay que tomarlos solo bajo prescripción médica, sin automedicarse e informarse de posibles interferencias con otros medicamentos.
  • No fumar: el humo del tabaco, y también el monóxido de carbono de la contaminación, dañan las células del oído. Los fumadores pasivos tampoco se libran.
  • Comer de forma saludable: la pérdida auditiva se relaciona también con las enfermedades cardiacas, la tensión arterial alta, las alteraciones de la glándula tiroides y la diabetes. Llevar una dieta saludable y evitar el sobrepeso son conductas que protegen también la audición.
  • Hacer ejercicio: la actividad física reduce la posibilidad de padecer enfermedades cardiovasculares y las relacionadas con la obesidad, lo que remite al punto anterior.

Cuidar la higiene del oído: limpiar solo la parte más externa del oído con una toalla o gasa. Nunca introducir bastoncillos para su limpieza ni rascado. Si se necesita una limpieza frecuente se aconseja que sea realizada por un especialista

FACME presenta el modelo español de recertificación elaborado por las SSCC

La Federación de Asociaciones Científico Médicas de España (FACME), de la que forma parte la SEORL-CCC, ha presentado el modelo español de recertificación, que apuesta por el rigor científico, la sencillez y la compatibilidad con los modelos internacionales, y ha sido consensuado por las sociedades científicas españolas.

El documento, al que todavía pueden hacer aportaciones las SSCC, establece que la evaluación de las competencias/grupos competenciales incluye dos tipos de actividades. Por un lado, las de tipo A, o asistenciales, que supondrían el 60% de la ponderación. Y, las de tipo B, que comprendería las actividades de Formación Médica Continuada, Docencia e Investigación, que supondrían el 40%.

El modelo hace hincapié en que no debe suponer una excesiva carga burocrática para el médico, favoreciendo la solicitud de este reconocimiento al desempeño asistencial en la práctica diaria (usando para ello indicadores de práctica clínica habitual, proporcionados por las direcciones o en los pactos de gestión anuales o auto auditorías o auto registros sobre el número de procedimientos) y demás actividades de formación e investigación.

Cada sociedad científica nombrará un comité de recertificación, formado por especialistas de la misma considerados como “expertos” en herramientas de docencia y de evaluación. Sus funciones serán fijar y revisar periódicamente las competencias, los indicadores de cada una y los límites para considerarlas “aptas”, revisar las solicitudes y elaborar la propuesta de “recertificado” o “pendiente de recertificar” identificando las áreas donde deben ampliarse las evidencias.

No obstante, el Consejo Asesor de FACME podrá ser consultado por estos comités de expertos de las SSCC en los aspectos que consideren necesarios dentro del proceso de evaluación, con el objetivo de buscar la homogeneidad y el consenso en los criterios utilizados.

Descargar modelo de recertificación  de la sociedades científico-médicas de España. FACME. 

Síndrome de Ramsay-Hunt: síntomas y tratamiento

El síndrome de Ramsay Hunt es la consecuencia de la reactivación del virus de la varicela en forma de zóster, concretamente en forma de zóster ótico. Aparece una erupción vesicular característica en el conducto auditivo externo y el pabellón auricular asociada a dolor de oído intenso. El virus varicela-zoster se trata de un virus de la familia de los herpes virus, que se encuentra latente en el ganglio del nervio facial, y se puede reactivar, sobre todo en personas inmunodeprimidas. Cuando el zóster ótico se asocia a parálisis facial periférica del mismo lado, se denomina síndrome de Ramsay Hunt.

La parálisis facial periférica es la debilidad de los músculos de un lado de la cara que puede producirse por diferentes causas. La forma más frecuente es la Parálisis de Bell. Se desconoce el origen de está enfermedad, aunque algunos estudios apuntan a la reactivación del virus del herpes simple tipo I (VHS-1) como responsable. El zóster ótico es la segunda causa más frecuente de parálisis facial periférica en el adulto.

La parálisis facial en el Síndrome de Ramsay Hunt es más severa desde el inicio que la Parálisis de Bell, con un pronóstico funcional menos favorable. La probabilidad de recuperación sin tratamiento es solo del 20% (frente al 70% de la parálisis de Bell). De hecho, se estima que un paciente que sufra esta enfermedad no tiene más del 50% de probabilidades de recuperar una función facial normal con ausencia de secuelas tales como contracturas o sincinesias.

El perfil de los pacientes que sufren un zóster ótico es clásico y se encuentra bien definido. Se trata principalmente de sujetos mayores de 50 años, en especial mujeres, aunque, también puede ocurrir en gente joven. Entre los antecedentes personales se encuentra el haber padecido varicela en la infancia. Es habitual que los enfermos refieran algún antecedente ligado a situaciones de inmunosupresión como tumores, infecciones virales o tratamientos inmunosupresores.

Síntomas

La sintomatología inicial del síndrome de Ramsay-Hunt puede manifestarse de forma inespecífica pudiendo retrasar el diagnóstico y con ello el inicio de tratamiento. La sospecha clínica inicial y el seguimiento de los pacientes son la clave para un diagnóstico e inicio de tratamiento de forma precoz.

Los síntomas del Síndrome de Ramsay-Hunt son:

  • Parálisis facial de un lado de la cara.
  • Dolor de oído intenso.
  • Erupción en forma de vesículas en el pabellón auricular o en el conducto auditivo externo.
  • Dificultad para cerrar un ojo.
  • Zumbido en los oídos (tinnitus) .
  • Sensación de giro o movimiento (vértigo) .

En todos los casos los síntomas son temporales, si bien el tiempo de recuperación puede ser variable.

Tratamiento

Los plazos de recuperación dependen de la severidad del cuadro. Si la parálisis no llega a ser completa en pocas semanas suele resolverse sin secuelas. Por el contrario, en los casos de parálisis completa, esta puede durar varios meses.

El tratamiento aceptado hoy en día para esta entidad es la combinación de antivirales y corticoides, habitualmente por vía oral. Además, como en cualquier parálisis facial es fundamental asociar medidas de protección ocular, puesto que la córnea puede quedar expuesta como consecuencia de la debilidad de los párpados.

Investigadores españoles identifican un nuevo gen asociado a la enfermedad de Ménière (EM) familiar

Investigadores españoles del grupo de Otología y Otoneurología vinculado al Centro de Genómica e Investigación Oncológica (Genyo), que lidera el otorrinolaringólogo José Antonio López-Escámez en la Universidad de Granada y el Instituto Biosanitario de Granada han identificado un nuevo gen asociado a la enfermedad de Ménière (EM) familiar.

La audición y el equilibrio son procesos complejos en los que participan miles de genes. Si la secuencia de alguno de estos genes está alterada por mutaciones raras, estos procesos pueden verse afectados, provocando diferentes tipos de enfermedades con pérdida de audición, como la EM.

La EM es una enfermedad del oído interno que se define por episodios de vértigo recurrente, asociados con acúfenos y pérdida de audición progresiva. La EM familiar es una enfermedad rara que afecta a 6-7 de cada 100.000 personas en España.

Para esta nueva investigación, se ha analizado el exoma completo de 77 familias con EM. Los resultados han permitido identificar mutaciones de un solo nucleótido y deleciones raras en el gen TECTA en 6 familias diferentes. El estudio ha sido publicado en Clinical and Translational Medicine.

Este gen ya se había relacionado con otros tipos de sordera y no es el primer gen asociado a esta enfermedad. La genética de la EM familiar es compleja, habiéndose descrito en estos últimos años diferentes relaciones entre esta enfermedad y diversos genes, como OTOGMYO7ACDH23PCDH15 o ADGRV1.

Los resultados de este artículo indican que el origen de la EM familiar se encontraría en las proteínas que unen los cilios de las células auditivas o forman parte las membranas tectoria y otolítica. El grupo de investigación ‘Otología y Otoneurología CTS495’ liderado por el Prof. López-Escámez, presidente de la Comisión de Formación de la SEORL-CCC, es un referente internacional en la investigación de las alteraciones genéticas e inmunológicas de la EM.

Guía de diagnóstico diferencial de las lesiones cutáneas de la viruela del mono

Varias sociedades integradas en la Federación de Asociaciones Científico Médicas de España (FACME) han elaborado una guía de ayuda al diagnóstico diferencial de las lesiones cutáneas de la viruela del mono.

El objetivo del documento, que incluye variado material gráfico, es ayudar a los médicos a sospechar la enfermedad cuando existan elementos para ello, al mismo tiempo que se recuerdan las características de otros diagnósticos más prevalentes en nuestro medio.

Este documento ha sido redactado por la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV) en colaboración con la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC), la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (SEMFyC) y la Asociación Española de Pediatría (AEP) entre otras.

Puede consultar la guía aquí.