El 15% de los tumores debidos al tabaco se localizan en la zona de cabeza y cuello
Uno de cada cinco casos de cáncer en Europa es atribuible al tabaco, según un trabajo reciente publicado en European Journal of Cancer. Esto supone 750.000 casos debidos al tabaco. De todos ellos, la mitad afectan al pulmón y un 15% están localizados en el área de cabeza y cuello, afectando sobre todo al labio, la cavidad oral, la faringe y la laringe. De todo esto se concluye que un gran número de casos de cáncer se podría evitar si se evitara su principal causa prevenible: el tabaco.
El tiempo acumulado como fumador y la edad de inicio en el consumo de tabaco son dos factores de riesgo a tener en cuenta para desarrollar cáncer de cabeza y cuello. De hecho, los otorrinolaringólogos cirujanos de cabeza y cuello encuentran que en la mayoría de tumores detectados en esta área, los pacientes son fumadores y mantienen el hábito desde la adolescencia. De ahí que el objetivo que se plantea la SEORL-CCC sea concienciar desde los 13-14 años sobre los efectos del tabaquismo.
La SEORL-CCC puso en marcha finales de 2018 la campaña ‘Ponle un cero al tabaco’, para prevenir el cáncer de cabeza y cuello, y más en concreto el cáncer de laringe. En esta localización el hábito de fumar es responsable del 85% de los casos. Hasta la pandemia se recorrieron 38 institutos de distintas comunidades autónomas alcanzando a unos 2.800 adolescentes y jóvenes, con el objetivo de concienciarles y sensibilizarles sobre los peligros y consecuencias del tabaquismo. La acción consiste en una serie de charlas, en horario escolar, impartidas por un otorrinolaringólogo junto con un paciente laringectomizado, de tal manera que los alumnos puedan conocer visualmente el impacto que el cáncer de laringe supone. Se pretende que a medida que se vaya recuperando la normalidad en los centros educativos, la SEORL-CCC pueda retomar estas actividades que tan buena acogida han tenido.
El tabaco en los adolescentes
Según el Informe 2020 de ‘Alcohol, tabaco y drogas ilegales en España’ elaborado por el Observatorio Español de Drogas y Adicciones, el tabaco es la segunda droga más extendida entre los estudiantes de 14 a 18 años, después del alcohol. Así, el 41% de ellos ha fumado alguna vez en su vida. La media de edad en la que se consume el primer cigarro es de 14,1 años. Después la adquisición del hábito tabáquico diario comienza a los 14,7, algo más de medio año después de haber fumado por primera vez.
Tanto el tabaco como el alcohol son dos sustancias accesibles para los estudiantes. De hecho, más del 90% afirma no tener dificultad para conseguirlas. Así mismo, los jóvenes consideran que la medida más efectiva para resolver el problema de las drogas es la educación en las escuelas.